Un año de polémica resuelta: las autoridades suecas liberan las cajas de recarga de Easee
Tras más de un año de intensas revisiones y una parada temporal de las ventas, se ha producido un nuevo acontecimiento en torno a las cajas de carga de Easee, incluidos los modelos Easee Home y Easee Charge. Inicialmente, estos productos fueron señalados por la Autoridad Sueca de Seguridad Eléctrica debido a múltiples defectos técnicos, lo que llevó a una suspensión inmediata de las ventas y a la orden de reparar las unidades vendidas e instaladas.
El principal problema detectado se refería a la insuficiente separación entre disyuntores y a la incapacidad de manejar eficazmente corrientes elevadas, junto con la ausencia de un disyuntor de fugas a tierra incorporado conforme a las normas del sector. Estos problemas suscitaron importantes preocupaciones en materia de seguridad, lo que dio lugar a una revisión exhaustiva por parte de las autoridades.
Sin embargo, en un giro sorprendente, la Autoridad Sueca de Seguridad Eléctrica ha revisado ahora su postura sobre la necesidad de reparar inmediatamente las unidades instaladas. Según su última decisión, Easee ya no necesita reequipar o reparar las cajas de carga actualmente en uso. Esta decisión se produce tras una exhaustiva evaluación de riesgos que concluye que el riesgo de fallos graves es mínimo y, por tanto, no justifica las amplias medidas que serían necesarias para adaptar todas las instalaciones existentes.
Per Samuelsson, jefe del departamento de productos de la Autoridad Sueca de Seguridad Eléctrica, explicó los motivos de esta decisión: "Nuestros análisis sugieren que los fallos potenciales de estas cajas de carga no suponen actualmente un riesgo grave para las personas o los bienes. Nuestro objetivo es garantizar que, a medida que estas unidades envejezcan, el riesgo de fallos graves siga siendo mínimo."
A pesar de la decisión revisada de la autoridad sobre las reparaciones, se mantiene la prohibición de venta de los modelos afectados. Easee está obligada a mantener una comunicación permanente con la autoridad, facilitando predicciones de fallos potenciales y resultados de fallos reales. Este seguimiento continuo tiene por objeto prevenir cualquier riesgo futuro que pueda derivarse de la obsolescencia de estos dispositivos.
Esta decisión es sin duda un alivio para Easee y sus clientes, que se enfrentaban a la perspectiva de reparaciones generalizadas y potencialmente costosas. También pone de relieve las complejidades que entraña la regulación y supervisión de las normas de seguridad eléctrica, en las que debe gestionarse cuidadosamente el equilibrio entre seguridad y medidas prácticas.
Para los usuarios actuales de las cajas de carga de Easee, esto significa que sus instalaciones pueden permanecer en su lugar sin cambios. Sin embargo, deben permanecer atentos a futuras actualizaciones o retiradas, en caso de que nuevas evaluaciones cambien la comprensión actual de estos riesgos.
A medida que se desarrolle la situación, será interesante ver cómo Easee da los siguientes pasos para restablecer la plena confianza en sus productos, respetando al mismo tiempo las estrictas normas de seguridad suecas. Por ahora, al menos, sus clientes pueden respirar tranquilos.
Fuente:(https://alltomelbil.se/vandning-bristfalliga-easee-laddboxar-behover-inte-at